Por favor, consideren la idea de seguir este plan con un corazón sincero que busca a Dios a fin de que les ayude a tener el matrimonio que Dios desea que tengan. Tengan en cuenta que este camino no es un camino al cual se llega de la noche a la mañana. Necesitarán ser muy pacientes con su pareja.

DETERMÍNENSE AMAR LA PALABRA DE DIOS

Antes de embarcarse en un viaje de perdón y reconstrucción, ambos necesitan determinar que van a obedecer la Palabra de Dios. Esto significa que la palabra “divorcio” ni siquiera está incluida en su vocabulario. En cuanto al matrimonio Malaquías 2:16 dice, “Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio…” Mateo 19:6 dice, “Así que no son ya más dos, sino una sola carne; por tanto, lo que Dios juntó, no lo separe el hombre.”

Además de sacar la opción del divorcio de plano, he estructurado una lista de cosas que les ayudarán a comenzar, como pareja, a obedecer lo que Dios les ha dicho que hagan (véase la hoja titulada “Señor, ¿qué quieres que yo haga?”). ¡Determinen que van a obedecer lo que Dios diga!

TENGAN UN TIEMPO TODOS LOS DÍAS Y/O NOCHES CUANDO PUEDAN LEER LA PALABRA DE DIOS Y ORAR

Sería bueno leer diferentes pasajes de la Escritura que hablan del matrimonio. Además es un buen tiempo para que compartan sus pedidos de oración y oren el uno por el otro durante este tiempo. ¡Es difícil mantener un conflicto con alguien con quien ora sinceramente a Dios! A propósito, la relación que tengan puede ayudar o estorbar sus oraciones (1 Pedro 3:5-7)

SIRVAN A DIOS JUNTOS COMO PAREJA/FAMILIA

Sé que podrían pensar que no pueden servir a Dios con efectividad cuando su matrimonio pasa por problemas, pero personalmente creo que es un error sentarse durante este tiempo y no hacer nada. Les recomiendo que encuentren un ministerio en el que puedan servir al Señor juntos y estar ocupados en la obra del Señor. Podrían involucrarse en: la visitación de adolescentes, actividades de adolescentes, el ministerio de rutas, etc.

SIÉNTENSE JUNTOS EN CADA SERVICIO DE SU IGLESIA LOCAL

Determinen que van a ir a la casa de Dios juntos cada vez que se abran las puertas (escuela dominical, domingo por la mañana, domingo por la noche y miércoles por la noche). Les aconsejo que ambos estén en la escuela dominical juntos así como en todos los servicios posibles para que escuchen la predicación y la enseñanza de la Palabra de Dios. Les recomiendo que los hijos no se sienten entre ustedes, pero ustedes sí siéntense uno al lado del otro. A propósito, ¡los hijos no pueden ser el motivo para permanecer juntos!

SEPAREN TIEMPO TODOS LOS DÍAS PARA HABLAR Y COMUNICARSE ENTRE USTEDES

No hay duda que la falta de comunicación es un problema importante en los matrimonios de hoy en día. Les recomiendo que separen tiempo todos los días sólo para hablar de los eventos del día. Para ayudarles a comenzar con ello he incluido Hojas de “Ayuda de Comunicación.” Sería bueno incluir a sus hijos en estas conversaciones. Sin embargo, también le recomendaría que pasen tiempo a solas.

SOMÉTANSE EL UNO AL OTRO

Efesios 5:21 Someteos unos a otros en el temor de Dios. Cuando sus corazones estén bien con el Señor les animo a que se reúnan y sean honestos con respecto a lo que ve el uno del otro.  Sin duda el diablo va a intentar que esto los moleste. Incluso podría meterles el pensamiento, “Eso no es justo.” No obstante, necesitan saber que estas son las cosas que su pareja siente en este momento. Mi consejo es que acepten estas cosas y dejen que su pareja les diga por qué se siente así y que les ayude a cambiar cuando lo necesiten. No tomen como personales las cosas que su pareja les diga, sino más bien lleven estas cosas al Señor en oración. Esta lista puede y debería llegar a ser una lista de oración personal para presentar ante Dios para que les ayude y les cambie. Deben “tragarse su orgullo” y determinar que van a cambiar la forma en que su pareja se siente con ustedes. La forma en que cambian su matrimonio es cambiando ustedes primero, ese es el reto.

 NO VAYAN A DORMIR ESTANDO ENOJADOS EL UNO CON EL OTRO

Efesios 4:26 … no se ponga el sol sobre vuestro enojo. Determinen que no irán a dormir estando enojados el uno con el otro. Esto hará que sean proactivos en la resolución de problemas y que se perdonen el uno al otro.

DEJEN QUE DIOS OBRE EN USTEDES

El punto que estoy tratando de mostrar es que el Señor conoce cada pequeño detalle de nuestras vidas. Sería bueno que hagan una lista de las cosas que Dios quiere que COMIENCEN y las que quiere que DEJEN de hacer. Pídanle al Señor que les revele lo que tiene que estar presente en esta lista y determinen hacer lo que les diga. Muchas veces un matrimonio con problemas tiene personas que miran mucho a su pareja y no se ven lo suficiente. Miren al espejo y dense una mirada bíblica y honesta, y pídanle al Señor que les muestre dónde necesitan cambiar. Cuando sea apropiado, acérquense a su pareja y pídanle perdón o disculpas por algo mal hecho. No le reste importancia a lo que el Señor les muestra sobre ustedes mismos.

LIMITEN LA COMUNICACIÓN DE SUS PROBLEMAS CON OTROS

Hablar abiertamente de sus problemas con otros comúnmente hace que se provoquen comentarios negativos hacia la pareja. Parece que estos tiempos de comunicación se vuelven tiempos de chismes en lugar de ser verdadera ayuda bíblica. Les recomiendo que la comunicación que tengan con otros edifique su matrimonio y que no sea negativa puesto que esto puede poner a la persona a la cual le hablan en la tentación de difundir las noticias o juzgar falsamente a su pareja. Habiendo dicho esto, es bueno recibir el consejo que agrada a Dios. No les estoy diciendo que nunca hablen sobre su matrimonio con otros, sino que se aseguren que aquellos a quienes les hablan son personas que quieren ayudar y son dignas de confianza.

ELIJAN PERDONAR

Efesios 4:31-32 Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo. Aunque incluso puede ser difícil pensar en ello, deben decidir perdonar a su pareja. El perdón verdadero no sigue sacando a colación el pecado.

DETERMÍNENSE IMITAR A DIOS Y MANIFESTAR EL FRUTO DEL ESPÍRITU EN SU MATRIMONIO

Efesios 5:1 Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. Gálatas 5:22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Cuando imitemos al Señor viviremos como Él. Esto significa que seremos misericordiosos, compasivos, perdonadores, pacientes, etc. con nuestra pareja. Pregúntense si en verdad están manifestando el fruto del Espíritu en su matrimonio. ¿Pueden considerar que ustedes son amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza? Les estoy dando una serie que prediqué sobre el primero de estos tipos de “amor.” Es el amor ágape—el amor de Dios. Escuchen estos mensajes y pídanle al Señor que les ayude en su matrimonio.

SEAN PACIENTES EL UNO CON EL OTRO

Cada uno de ustedes ha manifestado sus preocupaciones el uno con el otro. Sin lugar a dudas, algunas de estas “faltas” son verdaderas y necesitan resolverse. No obstante, deben ser pacientes con su pareja mientras se corrigen estas cosas. Además, necesitan ser pacientes cuando su pareja no “confíe” en el cambio que sí están logrando. Permitan que el Señor convenza a su pareja de la verdad.

 LEAN LIBROS APROPIADOS Y ÚTILES SOBRE EL MATRIMONIO

Les recomendaría que busquen libros útiles sobre el matrimonio que traten con las cosas con las que tienen problemas. Pueden ser libros sobre el perdón, la confianza, la fidelidad, etc. Sería bueno que aborden estos libros juntos.

TENGAN UN NUEVO COMIENZO

¿Recuerdan cómo se sintieron cuando comenzaron a tener citas? ¿Recuerdan cuán “enamorados” estaban? ¡Eso puede ocurrir otra vez! Les recomiendo que comiencen otra vez. Vuelvan a tener citas nocturnas. Regresen al principio y comiencen de nuevo.

ESTABLEZCAN UNA RENDICIÓN DE CUENTAS CON UNA PERSONA PIADOSA/DIGNA DE CONFIANZA

Esta persona puede ser su pareja o una persona del mismo sexo que constantemente les apunte al Señor y Su voluntad para sus vidas. Proverbios 27:17 dice, “Hierro con hierro se aguza; y así el hombre aguza el rostro de su amigo.” Júntense con alguien que en verdad ame al Señor, les ame y que desee que la voluntad del Señor se haga en su matrimonio y hagan que les pida cuentas sobre este plan.

 DEPENDAN DE DIOS

Juan 15:5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. Génesis 18:14 ¿Hay para Dios alguna cosa difícil? Si tratan de corregir esto estando en la carne nunca funcionará, pero si permiten que el Señor obre Él les dará el matrimonio que ambos desean.

 ¡Mi esposa y yo les amamos mucho! Como su pastor, sé que el Señor quiere obrar en su matrimonio. ¡Dejen que lo haga! No será un camino breve y simple, ¡pero al final habrá valido la pena! Sepa que mi esposa y yo estamos aquí para ustedes y estamos orando para el Señor obre de una forma increíble. Planeamos saber de ustedes de manera habitual para ver cómo les está yendo.